CELEBREMOS EN FAMILIA EL MES DEL ORGULLO (LGBTQ)
Los seres humanos nos hemos acostumbrado a usar clasificaciones y categorías, que nos han servido para identificar y resolver problemas, pero a la vez, hemos terminado siendo clasificados y categorizados entre nosotros mismos, por una u otra característica o identificación, bajo ciertos estereotipos sociales que se consideran “normales”. Sin embargo, ¿Cuantos seres humanos quedamos por fuera de esta caracterización? ¿Has considerado esto alguna vez? ¿Podrías imaginarte como te sentirías? ¿Has sido parte en algún momento de esta clasificación? ¿Has sido excluido? o ¿Has excluido a alguien o a otros por sus diferencias o por su identificación?
No intento hacer un análisis muy amplio, ni tampoco un juicio de valores. Solo deseo que cada persona pueda verse, (a sí mismo y a los demás), como un ser único e irrepetible, con capacidades y limitaciones, con alegrías y tristezas, con éxitos y fracasos, y más aún, con la capacidad irrevocable de tomar sus propias decisiones y la capacidad de expresar libre y sinceramente sus sentimientos, con el derecho a ser respetado y con la obligación de respetar a los demás teniendo en cuenta sus diferencias en todos los ámbitos de su vida.
La celebración del mes del orgullo es una invitación que se nos presenta para acercarnos a nuestras realidades y las de quienes nos rodean. Especialmente, podríamos reconocer en nuestras propias familias, que hay por lo menos una persona que se identifica con alguna de las categorías LGBTQ. Es decir, en la mayoría de las familias, por no decir en todas, hay por lo menos una persona que celebra su singularidad con orgullo. No obstante, puede que también nos encontremos con que alguno se ha ido quedando al margen o ha sido excluido precisamente por esta identificación, o por no identificarse con una categoría socialmente aceptada. Y es que debemos recordar, que no es solo una celebración de la comunidad Gay, como el imaginario social suele presentarlo; incluye también a personas que se identifican como Lesbiana, Bisexual, Transexual, transgénero y también aquellos que se identifican como Queer.
Precisamente, esta última categoría suele generar muchas incomprensiones, pues se describe Queer como extraño, inusual, divertido, peculiar, curioso, bizarro, extravagante. Relacionado a la identidad sexual o de genero que no corresponde a las socialmente establecidas, especialmente a las normas heterosexuales, pero que no necesariamente lo excluye. De esta manera, podemos ver, la celebración del orgullo, como un inmenso abanico que se cubre con la bandera multicolor del arco iris y que invita a identificarse con la libertad, con la singularidad, pero también con nuestra humanidad.
Por ello, me gustaría preguntarte querido lector, … alguno de estos términos anteriormente expresados, ¿te describe a ti o a algún miembro de tu familia? Si la respuesta es sí, entonces estamos en sintonía para que celebremos en familia el mes del orgullo. Con confianza, sentirnos orgullosos de ser únicos y diferentes, y a la vez, estar juntos; orgullosos de apoyar, respaldar y acompañar a nuestros hijos, sobrinos, amigos y conocidos a mostrarse como son y no ser discriminados desde ningún punto de vista, mucho menos por su propia familia.
Luis Aguirre, Asistente de Comportamiento de Allies in Caring, Inc.